Soluciones creativas y personalizadas para cada camiseta

Nuestra historia comenzó con un sueño, el de Babacar, un joven senegalés que llegó a España con apenas catorce años, buscando nuevas oportunidades y huyendo de las adversidades. Su pasión por el fútbol y su destreza en el campo lo llevaron a ser fichado por equipos importantes, pero pronto se encontró con la primera barrera: ser menor de edad sin tutores legales que pudieran firmar su contrato.

Después de dos lesiones importantes que marcaron su carrera deportiva, Babacar decidió dar un giro a su vida. Con un espíritu incansable y una creatividad innata, comenzó a diseñar y a confeccionar prendas de alta calidad, lo que lo llevó a convertirse en diseñador y sastre. Trabajó en una empresa del sector hasta que, tras adquirir experiencia, decidió emprender su propio camino y abrir su propio taller. Su dedicación y esfuerzo le permitieron crecer rápidamente, formando un equipo de más de cinco personas que le ayudaron a expandir su empresa.

Sin embargo, la pandemia trajo consigo desafíos inesperados. La crisis sanitaria obligó a Babacar a cerrar temporalmente su taller, pero su visión no se apagó. Dos años después, llevó su maquinaria y todo lo que había aprendido a Senegal, donde abrió nuevas oportunidades laborales para su comunidad, brindando empleo y formación a quienes más lo necesitaban.

Mientras tanto, en España, Babacar se reinventó nuevamente. Aprovechando su experiencia y pasión por la estampación, fundó una pequeña empresa especializada en la personalización de camisetas, con un enfoque único y auténtico. Hoy, seguimos creciendo y ofreciendo productos de calidad con un toque personal, basados en los valores de esfuerzo, superación y compromiso que Babacar ha llevado consigo a lo largo de su vida.